Filipinas. Negros y Cebu

Siento haber tardado tanto en escribir el blog. La verdad con los rollos de busqueda de trabajo...etc no he estado muy relajado últimamente. Podría ser peor la verdad. Hemos pasado 3 semanas en Filipinas, el tiempo que dan de visado cuando uno llega. Como hay tantas islas era difícil decidir a donde ir. Gente nos dijo ir allí, otra gente, ir allá. Al final decidimos dividir las dos semanas entre las islas de Negros y Cebu. Una pareja alemana nos dio mogollón de información de donde ir, que ver y demás en ambas islas. Así que llegamos de la ultramoderna Hong Kong a la relajada Filipinas. Del aeropuerto de Negros, que no es mas grande que el de Albacete, fuimos a pillar el bus en un triciclo. Es el taxi local, le ponen un sidecar rudimentario todo tuneao a una especie de vespino o moto rusa/china tipo rieju y ya tienes un taxi. La gente se monta a mitad de camino y cuando te das cuenta tienes la mitad del pueblo en esta especie de híbrido. Por supuesto cuando digo gente, incluyo bolsas de compra, maletas, pollos y hasta gorrinos atados donde se pueda. Empezamos en Sipalay playa. Muy bonita. Aquí el mar es super azul claro con rocas, pequeños montículos todo verdes sobresaliendo del agua que hacen el paisaje incluso more escénico. En Sipalay conocimos un pescador con su familia y le convencimos para que nos añadieran a las cenas familiares, por supuesto pagandoles, aceptaron alegremente y aprendimos mogollón de ellos, que majos que eran. La mayoría de los hoteles turísticos clavan por la comida el triple de lo que cuesta en un restaurante local y no esta tan bueno. Un día en el pueblo le pregunte a un tricitaxista si había gente que alquilase habitaciones de su casa y sin mas el ofreció su casa. Fue una experiencia muy guapa. Nos dieron una habitación con un ventilador para ahuyentar los mosquitos, porque no tenían mosquitera, y pasamos las noches bebiendo ron y comiendo pescado a la parrilla que es la tapa que acompaña la bebida, al menos en su casa...mmmmm, estaba riquísimo, y no me refiero a ron solo!! ;-) Fuimos aun par de sitios mas que no necesitan que me extienda mucho. Lo único relevante que ocurrió fue la desgraciada noticia del Tsunami de Japon con avisos de evacuación de sitios costeros en Filipinas. Estábamos Hannah y yo comiendonos un pollo asado, que son muy comunes aquí, cuando nos llamó la madre de Hannah bastante exaltada contandonos lo que había pasado. Nos acojono con razón. Nos dejamos medio pollo y casi me atraganto con los huesecillos. Creo que conforme nos decía las noticias yo masticaba sin pensar que estaba comiendo. Al final no paso nada. Nos aseguramos que no estábamos en peligro antes de volver a nuestra cabaña a 3 metros de la orilla de la playa. Esa noche nos bebimos 2 litros de San Miguel filipina sentados en la playa pensando que afortunados éramos imaginando lo mal que podriamos estar y lamentando la desgracia de Japon. Para terminar fuimos a la isla de Cebu, el clima estaba revuelto después del terremoto y tsunami de Japon. Estuvimos snorkelling y turisteando, que a pesar de la intermitente lluvia estuvo genial. Filipinas es muy famosa por el buceo. Para poner el broche de oro, terminamos en la islita de Malapascua. Una pasada, el color de la arena, del agua...te hipnotiza. Blanco y azul intenso. Hicimos mas snorkelling y pasamos unos días geniales conociendo gente local. En Filipinas las peleas de gallos son el equivalente al fútbol. To dios va y apuesta o tiene gallos que cría para ese propósito. Hemos estado en varias. La ultima fue con el dueño del ultimo hostal donde nos quedamos que gano y nos invito a cenar el pollo perdedor que lo trae el perdedor para comerlo todos juntos como es costumbre. Claro, bañado con bastante ron como también es costumbre. ;-) Otra cosa que se me olvidaba es que la lengua local es muy parecida al español. Al ser una excolonia descubierta por Magallanes la comida, la lengua, la religión, todo esta influenciado por los españoles. Ósea que cuando te dicen el precio despues de comerte un puchero, arroz caldoso o un cerdo en adobo suena algo así como, siento sinquenta y sinco peisos. Vamos para Vietnam. He oído que la comida vietnamita es alucinante!!!